No elijo ser un hombre común y corriente, es mi derecho ser nada común.
Busco la oportunidad para desarrollar los talentos que Dios me dio.
No quiero ser un ciudadano mantenido, obligado a ser pobre y opacado, obligado a tener personas que me cuiden.
Quiero tomar un riesgo calculado, soñar y crear, fracasar y ser exitoso.
Me rehúso a cambiar la incentiva por la dádiva.
Prefiero los retos de la vida a una existencia garantizada; la emoción de sentirme lleno a la calma amarga de la utopía.
NO cambiare La Libertad por beneficencia ni mi dignidad por unas sobras.
Nunca me acobardare ante ningún maestro terrenal ni cederé ante ninguna amenaza.
Es mi herencia permanecer erguido, orgulloso y sin miedo; pensar y actuar por mi mismo.
Disfrutar de los beneficios de mis creaciones y enfrentar el mundo con osadía, diciendo "Esto, con la ayuda de Dios, lo he hecho".
No hay comentarios:
Publicar un comentario